16 diciembre 2022. La Mutualidad de Procuradores ha rendido un sentido homenaje a Francisco de Bethencourt, quien dedicó más de 30 años a esta a institución. Fue consejero desde 1989, presidente de la comisión que redactó los nuevos estatutos 10 años después, secretario del consejo directivo desde 2012 hasta 2016 y presidente desde entonces hasta que llegó la pandemia en 2020.
Tras 33 años de dedicación a la Mutualidad, la situación sanitaria derivada del covid le obligó a dejar el cargo de presidente porque sus médicos desaconsejaban los desplazamientos que requerían sus funciones. Tuvo que tomar la difícil decisión de ponerse a un lado, con gran pesar por su parte y la de todo el equipo que le acompañaba. Desde entonces, continuó colaborando como vocal del consejo directivo y ahora ha comunicado que se retirará tras la asamblea general de 2023.
Bajo su mandato se pusieron en marcha la Correduría y la Fundación. Quiso potenciar la parte solidaria de la Mutualidad para lo que impulsó una correduría de seguros, cuyos beneficios irían destinados al fondo social que luego se convertiría en la Fundación.
Jesús González-Puelles Casal, presidente de la Mutualidad, relató la transformación que experimentó la institución durante los años de dedicación de Francisco a la misma, poniendo como ejemplo que así lo manifestaban muchos mutualistas que destacaban que “la mutualidad ha cambiado: “La Mutualidad experimentó una transformación y modernización sin precedentes, acompañadas de la transparencia necesaria, de forma que los mutualistas podían consultar toda la documentación que quisieran”.
En el homenaje también participaron Juan Carlos Estévez, presidente del Consejo General de los Procuradores de España; Enrique Sanz Fernández-Lomana, presidente de la Confederación Española de Mutualidades; y José Manuel Romar, director general de la Mutualidad de Procuradores.
El actual presidente de la Mutualidad concluyó su intervención con un sincero agradecimiento a Francisco: “En nombre de la Mutualidad, del actual consejo directivo y de los anteriores de los que formaste parte, y de todos los empleados, te doy las gracias de todo corazón, querido Cisco, no solo por tu dedicación y entrega a esta institución, con la que te implicaste por encima de todo, sino también por la humanidad y el cariño que has dispensado a todos aquellos que hemos tenido la suerte de conocerte y trabajar contigo”.
