El Internet de las Cosas
Desde hace meses, es raro el evento, la conferencia donde no se habla de un nuevo concepto, que según los expertos revolucionará el futuro, estamos hablando del “Internet de las Cosas” (LoT, the Internet of Things), concepto que se refiere a la interconexión digital de objetos cotidianos con internet.
En términos coloquiales, que todas las cosas del mundo estén conectadas con internet. Pero no sólo nuestros dispositivos electrónicos que usamos día a día como móviles, tablets, tvs, consolas, vehículos, también cosas conectadas a la red que podrían considerarse como parte de ese Internet de las cosas como los electrodomésticos, puesto que existen frigoríficos, hornos y lavadoras que pueden ser controladas desde un smartphone gracias a la conexión a Internet con la que cuentan. Ese es solo el primer paso de lo que está por llegar. Tanto a nivel doméstico como a nivel profesional, el Internet de las cosas podría cambiar el mundo tal y como lo conocemos hoy.
Las previsiones indican que para el año 2020, habrá 4.500 millones de internautas, mientras que el número de conexiones ascenderá a 50.000 millones que se incrementará en otras tantas, pues cada objeto puede relacionarse con el resto y el IoT generará 200 mil millones de cosas y dispositivos conectados presentes en distintos ámbitos de nuestra vida, desde el doméstico al profesional.
Así una compañía de seguros que ofrezca seguros de automóvil, podrá recabar información de los propios vehículos, pues estos podrán evaluar los daños sufridos en un accidente y enviar informes a la aseguradora, evitando así al conductor trámites engorrosos, y mejorando la eficiencia de la empresa y satisfacción del cliente. No es ciencia ficción, pues existen seguros ligados a la telemática que permiten al cliente suscribir un seguro en función del uso del vehículo.
¿Y a los despachos de Procuradores? Estos trabajarán con aplicaciones cloud para gestionar sus procedimientos, relacionándose con las partes interesadas en el proceso a través de estos dispositivos. La nueva tecnología en desarrollos y aplicaciones permitirán una administración de justicia por internet basada en los objetos, donde el espacio físico deja de tener sentido.
La utilidad de Internet no tiene límites, y las previsiones de los gurús tecnológicos es que la tecnología está cambiando la forma de relacionarse entre los clientes y las empresas, y lo que antes era válido dentro de poco será parte de la historia.
Álvaro Sastre – Director adjunto de la Mutualidad de Procuradores